6 CUOTAS SIN INTERÉS + ENVÍO GRATIS EN COMPRAS NACIONALES


Por Cristina A. Bustos*

COVID-19
MEDICINA DE URGENCIA: CAMBIOS EN LA OPERATIVA DE TRABAJO Y PROTOCOLOS

La actuación médica y los modelos organizativos fueron posibles en base a lo observado en países europeos, provisionando así materiales y recursos necesarios para enfrentar las contingencias futuras de la pandemia covid-19.
La puesta en marcha de la operativa de trabajo, es elegida a través de protocolos nacionales o internacionales en constante revisión para la toma de decisiones y tratamiento de los enfermos.
La parálisis económica a la que ningún país escapó, sumado a las medidas de confinamiento traen importantes repercusiones entre el acatamiento, el temor y la tensión social.
Las medidas prioritarias se centralizan en la población, sus puntos vulnerables, el sistema de salud y sus integrantes, siendo la protección de los mismos fundamental para que nos protejan a todos.
Nuestro sistema sanitario no está preparado para amortizar el impacto de miles de enfermos, es por eso que se habla de “aplanar la curva”, una medida tendiente a disminuir el número de contagios para que puedan ser recibidos sin problemas por el sistema de salud. Este es el objetivo central de la cuarentena.
Los hospitales y sistemas privados han logrado adaptarse siguiendo algunos modelos de Europa y China, haciendo una reestructuración de las áreas y de los profesionales de la salud.
La reasignación de médicos – como consecuencia de la suspensión de actividades habituales durante la pandemia COVID19 – tienen por finalidad disponer de recursos materiales y humanos especializados para ganar espacios y liberar camas, que antes eran ocupadas por prácticas llamadas “demorables”.
Un punto destacado es la capacitación de los profesionales y su protección. Muchos médicos, en el primero de los casos, habitualmente no están familiarizados para desarrollarse en otras áreas a las que han sido reasignados, por lo tanto, es fundamental que sepan qué hacer y lo hagan bien. Capacitarse es un deber del profesional y una herramienta que debe ser facilitada por las autoridades responsables.
La información adecuada y los equipos personales de protección deben ser suministrados al profesional con un instructivo de colocación y otro riguroso de extracción, ya que se conoce que el mal manejo de este ultimo incrementa el riesgo de contagio.
La relación demanda/camas en UCI [1] en pacientes con patologías respiratorias severas complicadas que requieren respirador, es una de las situaciones más delicadas en la pandemia dado que habitualmente las áreas de terapia intensiva son de alta ocupación en condiciones normales y de difícil ampliación, por la tecnología y la formación de los profesionales que se requiere en ellas. En CABA existen una relación de 7,1 camas / 1000 habitantes [2].

De acuerdo a lo normado por la ley 15.464 en sus artículo 4 y 12, indica que los profesionales médicos están obligados a reportar las patologías denunciables registradas en el Sistema Nacional de Vigilancia de Salud, un sistema digitalizado que engloba extensamente y a nivel nacional la notificación de todos los casos. Los sujetos obligados a realizar la notificación son:

  • Médicos que asistan pacientes.
  • Profesionales de laboratorio que estudien muestras de casos sospechosos, probables, confirmados y descartados.
  • Autoridades de servicios de laboratorio y establecimientos sanitarios públicos o privados.
  • Autoridades sanitarias municipales y nacionales.

Algunas caracteristicas del sistema son:

a.  Los procedimientos deben quedar consignados, pudiendo ser consultados por el personal autorizado, con estadísticas de proyección.
b.  Las consignas son dinámicas y adaptables al estado de situación real, por ejemplo la definición de caso sospechoso que ha variado desde el inicio de la pandemia.
c.  Documentación complementaria: La historia clínica epidemiológica, la notificación en el SISA [3], historia clínica para la atención y seguimiento de casos de COVID-19.


Reestructuración de las áreas sanitarias

La reasignación de sectores comienza desde las áreas que no son esenciales para integrar dichos recursos al plano de la pandemia. Se establecen zonas de internación especiales para COVID-19, asistencia de casos urgentes, separación de casos sospechosos o individuos febriles de los que no lo son, y habilitación en un sentido o circuito de deambulación única.
En lo que respecta a la Atención Primaria, se ocupa de la consulta y detección del caso sospechoso, el testeo y aislamiento hasta su resultado, una vez cumplidos los criterios establecidos por las autoridades sanitarias.
El área de aislamiento puede ser un consultorio del centro de salud o un tráiler o camión sanitario ubicado fuera del sector o guardia general. El tamaño del área de aislamiento debe ser suficiente para albergar más de un paciente, y que los mismos puedan guardar una distancia mínima de 1 metro hasta finalizar su atención. Debe estar claramente señalizada a través de carteles u otro medio identificable, ubicados en lugares estratégicos, para evitar el tránsito innecesario de personas.
Todo el personal debe conocer su localización y funciones - en especial en circuitos respiratorios - sus responsabilidades, y el poder de resolución pronta ante situaciones problemáticas o de desborde. Deben ser capacitados para el uso de los equipos de protección, la higiene y desinfección y el manejo de desechos.

La estructura operativa de los médicos en la primera línea de acción en las zonas vulnerables, se hace más intensa debido a los espacios reducidos de las viviendas, la alta densidad poblacional en ellas, alto riesgo por la edad, las condiciones ambientales y las pluripatologías.
Esta operativa se repite en las poblaciones cerradas como son geriátricos, hogares de discapacitados, que rquieren testeos, control de casos estrechos, aislamiento preventivo.
Los cambios en los hábitos cotidianos han sido fundamentales en la sociedad: lavarse las manos, higienizar las cosas y alimentos que ingresan a nuestro hogar, barbijo de uso permanente en la vía pública, dejar los zapatos fuera del hogar, cambio de ropas al ingresar a casa, toser o estornudar tapándose con el brazo semiflexionado. Todos estos cambios son en el “adentro”.
La repercusión también afecta a cambios en el “afuera”: no se permite la conglomeración de personas, hay distanciamiento social de 1 a 2 mts en la espera de los comercios, el uso de barbijo para ingresar a comercios o transporte, uso de alcohol en gel, cierre de comercios y apertura gradual de los esenciales, restricción del transporte de gente, habilitación de permisos para profesiones esenciales - salud, fuerzas de seguridad, y casos puntuales.
 

Estado de situación. Visión médica y social

Saber en qué momento la curva comienza a descender sin provocar un colapso sanitario, como ha ocurrido en otros países, es un interrogante inquietante que se planea por proyección estadística de acuerdo a cómo es el comportamiento de los casos durante la pandemia.
La contracara de este escenario está en el incremento significativo de los casos, en donde se comprende que la cuarentena ayuda, pero no es suficiente. El alto nivel de contagiosidad del virus está relacionado al tránsito de individuos y al factor R0 y Re, definido el primero como el número de casos en promedio que una persona infectada puede causar durante el periodo de contagio. Es un término epidemiológico que sirve para definir el máximo potencial epidémico de un patógeno.
La extensión y susceptibilidad de un grupo de gente al contagio será menor si sus individuos están vacunados o adquieren inmunidad al virus.
Desde el enfoque epidemiológico si tenemos un R0 menor que 1, la enfermedad tiende a desaparecer porque en promedio una persona infectada va a contagiar a menos de una persona susceptible. Otra situación es que el R0 sea mayor a 1, entonces la enfermedad va a diseminarse, por lo cual la forma de frenar un brote es lograr bajar el valor de R0. Este valor es esencial al principio de la pandemia para valorar letalidad y tasa de contagio.

R0 AL INICIO DE LA ENFERMEDAD

TRANSMISIÓN
Enero = 2 Importada
Estimado real de 5,7 Comunitaria
 

Las medidas de protección adecuadas, el incremento de número de testeos, la educación de la población y vigilancia epidemiológica son ejes fundamentales de este proceso.
Vemos en el cuadro que un R0 es igual a casi seis, esto significa que hasta cinco individuos susceptibles podrán contraer la enfermedad durante el periodo infeccioso del virus.
Otro dato es el Re, que es el número efectivo reproductivo del virus, en otras palabras, la estimación de cuantas personas en promedio se ha contagiado cada día a partir de casos notificados. La diferencia con el R0 es que este es un cálculo teórico y el Re es una valoración en tiempo real dinámica.

Por otra parte, la cuarentena implica una serie de restricciones en la actividad de personas no enfermas para evitar el contagio durante un periodo de tiempo no especificado. Se distinguen dentro de la misma distintas fases marcadas por la Organización Mundial de la Salud:
  • Fase 0: es el denominado periodo Inter pandémico, donde aparece una nueva cepa de virus/enfermedad en una región determinada. Denominada “zona cero”.
  • Fase 1: es aquella donde se declara oficialmente una pandemia, aparecen los primeros casos y se dictan las primeras medidas de prevención.
  • Fase 2: marcada por la aparición de los contagios comunitarios, que obligan a intensificar las medidas de prevención, como la distancia social, el cierre de lugares de confluencia de público (shoppings, colegios, clubes, recitales). Aumenta considerablemente el número de casos y muertes.
  • Fase 3: el número de contagios y de defunciones alcanza el punto máximo. Las medidas de prevención se deben reforzar. Continúa en otros países el curso de la pandemia en distintos grados. Conocida como “pico” de la enfermedad.
  • Fase 4: los contagios y muertes descienden en forma paulatina, se reanudan actividades con medidas de prevención básicas.
  • Fase 5: finaliza la pandemia con un análisis de situación de la región y sus consecuencias.

En base a esta división, los países han adoptado respuestas similares en razón a la transmisión y su origen, ya que conocemos casos importados (del exterior), por contacto estrecho (vinculados con casos importados) o comunitario (circulación entre personas de un área).
 

Consideraciones finales

Nos enfrentamos a una situación desconocida, impensada y desbordante para quienes están en la primera línea de atención del paciente, los recursos materiales, edilicios y humanos. Los médicos se encuentran limitados y es necesario reorganizarse y rearmarse para dar respuesta de manera rápida y efectiva.
La situación emocional desde el punto de vista ético a la hora de tomar decisiones ha provocado situaciones críticas para asegurar equidad distributiva en materia médica, justificando acciones y evaluando razonablemente las posibilidades del tratamiento, capacidad de respuesta que apoye al profesional médico y que tome en consideración el carácter dinámico de la pandemia y la revaloración de las acciones en forma casi constante.
En relación a la organización hospitalaria, ésta también se ve afectada; ya que hay un cambio que obliga a transformar zonas o servicios sanitarios, brindar protección y capacitación de médicos en lugares que no están habituados a trabajar, rotación de áreas críticas o de máximo contagio. El cuidado del recurso médico especializado es muy valioso, ya que está limitado y cuesta formar a enfermeros y médicos en terapia intensiva. Un profesional no puede exponerse a enfermar o morir por falta de equipamiento, no siendo tampoco ético por parte de la comunidad médica atender con equipos defectuosos o sin ellos.
La educación de la población general es otro desafío para vencer, ya que cambiar hábitos y costumbres no es fácil para quien ya lo tiene arraigado desde hace años.
Considerar que todos los esfuerzos en distintos puntos de la población y en las diferentes profesiones esenciales deben ser dirigidos en conjunto a circunscribir los casos, lograr la prevención y el tratamiento adecuado de todos los ciudadanos hasta que aparezca la ansiada vacuna.

 

Notas

[1] Unidad de Cuidados Intensivos.
[2] La OMS recomienda entre 8 a 10 camas por 1000 habitantes.
[3] Sistema Integral Sanitario Argentino.

Bibliografía

Bustos Cristina. ”Aspectos médico legales en la Guardia Médica”. Editorial Erga Omnes. 2019.
Enfermedad por coronavirus COVID19. Información científica técnica. Actualización del 2 de junio 2020. Centro de coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias. España. >
Manejo domiciliario del COVID-19. Documento técnico. Ministerio de Sanidad (17/3/2020.
Oliva J., Peña-Longobardo L.M., González López Valcárcer B., Zozaya González. Crisis económica y salud: lecciones aprendidas y recomendaciones para el futuro. Ministerio de sanidad, consumo y bienestar social. Madrid. 2018.
Protocolo de actuación frente a enfermedad SARS-Cov2 (COVID19)14/4/2020, Ministerio de Sanidad. España.
Protocolo general. Manejo en atención primaria de pacientes con COVID-19. Documento Técnico. Ministerio de Sanidad (17/3/2020.
Recomendaciones para el personal de la primera línea en la pandemia de COVID-19. Royal College Of Psychiatrists 1-8 Abr 2020. comentario publicado y divulgado de forma masiva a través del Boletín N° 9 COVID-19, INFORMES CHEQUEADOS.
Surico P., Jaleotti A. The economic of a pandemic: The case of Covid 19. London Business School. Marzo 2020.

 

* Médica Forense de la Justicia Nacional de la Morgue Judicial. Argentina. Médica Clínica del Servicio de Emergencias del Hospital Dr. Zubizarreta. Villa Devoto. Buenos Aires. Argentina. Especialista Universitaria en Medicina Legal , Medicina del Trabajo y Toxicología. Jefe de trabajos prácticos de Medicina Legal de diversas universidades. Abogada.

 

Si desea participar de nuestra «Sección Doctrina», contáctenos aquí >>